Esto ya me parece extraño, vengo
llegando a este lugar y mi cabeza, por inercia y solo
por inercia, se mueve en todas direcciones
buscando algo familiar, pero no lo encuentra.
Veo luces espectaculares, edificios monumentales,
calles infinitas. Quiero
recorrer todo esto. Quiero adentrarme
en este… ¿Nuevo mundo? Sí.
Necesito saber que se siente atravesar
estas grandes paredes. Experimentar el juego
de luces policromáticas dentro
de mi retina, me quita el sueño. Poder
ver el infrasonido moviéndose dentro me mi cerebro
es algo que no todos pueden hacer,
pero que es totalmente
recomendable. Estar frente al comienzo y el fin
de un arcoíris en sepia al mismo tiempo es un espectáculo
que pagaría por ver nuevamente.
Caminar sobre el Lago es algo que
no se puede hacer, pero mi
curiosidad llegó al 126%, no pude resistirme
a tocar con la punta de mis alas esa agua
magenta, que al contacto con la luz de
la tercera luna, se vuelve verde.
¿Lo hice todo? No. Creo que continuará mi viaje
